Sabemos que en el embarazo debemos tener cuidados extra, sobretodo por cuidar la salud de ese bebé que viene en camino. ¿Conoces las complicaciones o los síntomas de la diabetes gestacional? Si eres una mami que ya paso por esto puedes compartir con nosotros y otras futuras madres como fue tu proceso de diabetes gestacional, déjanos tus comentarios al final de este articulo.
La diabetes gestacional se manifiesta durante el embarazo (gestación). La diabetes gestacional causa un alto nivel de azúcar en sangre que puede afectar tu embarazo y la salud de tu bebé. A la mayoría de las mujeres se les hace un examen de detección para la diabetes en el segundo trimestre del embarazo. Las mujeres que tienen mayor riesgo pueden ser examinadas antes.
No sabemos qué causa la diabetes gestacional, pero tenemos ciertas pistas. La placenta sostiene al bebé mientras crece. Las hormonas de la placenta contribuyen al desarrollo del bebé. Pero estas hormonas también bloquean la acción de la insulina en el cuerpo de la madre. Este problema se llama resistencia a la insulina. La resistencia a la insulina dificulta que el cuerpo de la madre utilice la insulina. Es posible que necesite una cantidad de insulina hasta tres veces más alta.
La diabetes gestacional se inicia cuando el cuerpo no puede producir ni utilizar toda la insulina que necesita para el embarazo. Sin suficiente insulina, la glucosa no puede salir de la sangre y convertirse en energía. El nivel de glucosa sube porque se acumula en la sangre. Esto se llama hiperglucemia.
Formas en que la diabetes gestacional puede afectar a tu bebé
La diabetes gestacional afecta a la madre a finales del embarazo, después de que se ha formado el cuerpo del bebé, y mientras el bebé todavía está creciendo. Debido a esto, la diabetes gestacional no causa el tipo de defectos de nacimiento que a veces se presentan en bebés cuyas madres tenían diabetes antes del embarazo.
Sin embargo, la diabetes gestacional no tratada o mal controlada puede hacerle daño a su bebé. Cuando usted tiene diabetes gestacional, el páncreas funciona horas adicionales para producir insulina, pero la insulina no baja el nivel de glucosa de la sangre. Aunque la insulina no cruza la placenta, la glucosa y otros nutrientes sí lo hacen. La glucosa adicional en la sangre atraviesa la placenta, lo que hace que el bebé tenga un alto nivel de glucosa.Esto hace que el páncreas del bebé produzca más insulina para eliminar la glucosa en la sangre. Ya que, el bebé está recibiendo más energía de la que necesita para crecer y desarrollarse. La energía adicional se almacena como grasa.
Esto puede producir macrosomía o un bebé “gordo”. Los bebés con macrosomía enfrentan problemas propios de salud, entre ellos daño en los hombros durante el parto. Debido a la insulina adicional producida por el páncreas del bebé, los recién nacidos pueden tener un nivel de glucosa muy bajo al nacer y también corren mayor riesgo de tener problemas respiratorios. Los bebés con exceso de insulina corren mayor riesgo de ser obesos durante su niñez y tener diabetes de tipo 2 de adultos.
La diabetes gestacional también puede aumentar el riesgo de que la madre tenga lo siguiente:
Presión arterial alta y preeclampsia. La diabetes gestacional aumenta el riesgo de tener presión arterial alta y preeclampsia, una complicación grave del embarazo que provoca presión arterial alta y otros síntomas que pueden poner el riesgo tanto la vida de la madre como la del bebé.
Diabetes en el futuro. Si tienes diabetes gestacional, tienes mayor probabilidad de que vuelvas a padecerla en un futuro embarazo. También es más probable que tengas diabetes tipo 2 a medida que envejeces. Sin embargo, si eliges opciones de vida saludables, como comer alimentos sanos y hacer ejercicio, puedes contribuir a reducir el riesgo de diabetes tipo 2 en el futuro.
Prevención
No hay garantías cuando se trata de prevenir la diabetes gestacional, pero cuantos más hábitos saludables adoptes antes del embarazo, mejor. Si tuviste diabetes gestacional, estas opciones saludables pueden reducir el riesgo de padecerla en futuros embarazos o de tener diabetes tipo 2 más adelante.
Consume alimentos saludables. Elige alimentos ricos en fibra, con bajo contenido graso y pocas calorías. Céntrate en las frutas, los vegetales y los cereales integrales. Intenta consumir alimentos variados para alcanzar tus metas sin resignar el sabor ni la nutrición. Presta atención a los tamaños de las porciones.
Mantente activa. Hacer ejercicio antes del embarazo y durante este puede ayudarte a evitar que contraigas diabetes gestacional. Apunta a realizar, por lo menos, treinta minutos de actividad moderada la mayoría de los días de la semana. Haz una caminata a paso ligero todos los días. Anda en bicicleta. Nada algunos largos en la piscina. Si no puedes hacer treinta minutos de ejercicio seguidos por día, varias sesiones más cortas pueden ser igual de beneficiosas. Estaciona en un lugar más alejado cuando hagas mandados. Baja del autobús una parada antes de llegar a destino. Cada paso que des aumenta tus posibilidades de mantenerte saludable.
Baja los kilos de más que tienes antes del embarazo. Los médicos no recomiendan adelgazar durante el embarazo. Sin embargo, si estás planificando un embarazo, bajar el peso adicional que tienes antes de quedar embarazada puede ayudarte a tener un embarazo más saludable.
Concéntrate en hacer cambios permanentes a tus hábitos alimentarios. Motívate recordando los beneficios a largo plazo de bajar de peso, como tener un corazón más saludable, más energía y mayor autoestima.